martes, 4 de noviembre de 2014

La vida es un don de Dios

Mira hacia atrás. Mira todo lo que ya has vivido, los miles de momentos compartidos. Las experiencias, las emociones. ¿Crees que estás aquí por casualidad?
Yo no lo creo. Tú y tus circunstancias no pueden existir así, sin más. Eres el ser más perfecto con cada una de tus virtudes y tus defectos, y un ser perfecto solo pudo ser creado por otro ser más perfecto todavía.

Tienes un día más para disfrutar de este don divino. No busques más en tu pasado, es eso, simplemente pasado. Dios te ha dado la oportunidad de decidir que quieres hacer con estas preciadas 24 horas, eres el único dueño de tu tiempo. Aprovéchalo bien, porque cada día es único, y no vas a poder recuperar el tiempo perdido cuando quieras. Vive el hoy, disfrútalo, haz algo grande. Dios te está esperando, está apoyándote. Tiene guardado algo grande para ti, pero eres tú el que tiene que encontrarlo. No puedes esperar a ver la vida pasar, porque te aseguro que pasará sin ti. La vida viene e igual que viene se va, no espera a nadie.

No eres uno más. El proyecto de vida que te ha sido encomendado y que tú empiezas a forjar desde ya es único, nadie va a hacerlo por ti. Echale ganas a la vida, saca tu día a día con una sonrisa. Porque después, vendrá el mañana, y el hoy será pasado. Desde mi punto de vista no merece la pena vivir amargados, con preocupaciones, con miedos. Si la vida es un pestañeo que se hace lento, yo prefiero pasarlo con los míos y sobre todo con Dios a mi lado. Porque el me ha dado esto, mi pasado, mi presente y mi futuro. Si él quiere y hasta donde él quiera, por supuesto.

Habrá días malos, problemas. Nadie dijo que sería fácil, lo único que te aseguro es que merecerá la pena, pero todo depende de ti. Mi meta es llegar al último día de mi vida diciendo "He hecho todo lo que quería hacer. Me siento orgullosa incluso de mis errores"

Ahora, tras haber reflexionado todo esto, mira al frente. ¿Qué ves? Yo veo un futuro lleno de intriga, de metas, de nuevos momentos y de experiencias. Y quiero que Dios sea mi compañero de camino, ahora y siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario